Publicado por la Revista Forbes , Un estudio encuentra que los diferentes tipos de meditación cambian diferentes áreas del cerebro
Se ha discutido mucho sobre qué tipos de actividades mentales son capaces de cambiar el cerebro. Algunas promesas de IQ reforzado y función cerebral mejorada a través de “juegos cerebrales” especialmente diseñados se han esfumado. Mientras tanto, el entrenamiento de meditación y atención plena ha acumulado algunas pruebas impresionantes, lo que sugiere que las prácticas pueden cambiar no solo la estructura y función del cerebro, sino también nuestra conducta y la experiencia de momento a momento.
Ahora, un nuevo estudio del Instituto Max Planck encuentra que tres tipos diferentes de entrenamiento de meditación están relacionados con cambios en las regiones cerebrales correspondientes. Los resultados, publicados en Science Advances, tienen mucha relevancia para las escuelas, las empresas y, por supuesto, el público en general.
Los participantes, que tenían entre 20 y 55 años de edad, participaron en tres tipos diferentes de capacitación durante tres meses cada uno, totalizando un período de estudio de nueve meses. El primer entrenamiento fue apodado el módulo de “Presencia”, y fue muy similar a la meditación centrada en la conciencia, una práctica antigua que se ha estudiado mucho en los últimos años. En este estudio, los participantes aprendieron a enfocar su atención, regresándola cuando vagaba, y a atender la respiración y las sensaciones internas de su cuerpo.
El segundo entrenamiento se llamó “Afecto”, que buscaba mejorar la empatía y la compasión por los demás: los participantes aprendieron la meditación de “bondad amorosa” (metta) y trabajaron con compañeros, cuyo objetivo era mejorar la compasión y la empatía.
El último fue el módulo “Perspectiva”, similar a la meditación consciente o abierta. Aquí, el enfoque estaba en observar los propios pensamientos sin juzgar y mejorar la comprensión de las perspectivas de los demás.
Los investigadores apostaron que el entrenamiento en cada uno de estos métodos conduciría a un aumento de volumen en las áreas cerebrales correspondientes. Y esto fue en gran parte lo que encontraron, ya que escanearon los cerebros de los participantes al final de cada módulo y compararon los grupos entre sí. El entrenamiento en presencia se relacionó con un mayor grosor en la corteza prefrontal anterior (PFC) y la corteza cingulada anterior (ACC), que se sabe que están muy involucrados en la atención. El entrenamiento afectivo se relacionó con un mayor grosor en regiones que se sabe están involucradas en emociones impulsadas socialmente como la empatía; y Entrenamiento en perspectiva asociado con cambios en áreas involucradas en la comprensión de los estados mentales de otros y, curiosamente, inhibiendo la perspectiva de uno mismo.
Los resultados son emocionantes ya que ofrecen una visión aún más matizada de cómo la meditación puede cambiar el cerebro, y en un tiempo relativamente corto. Mucha investigación ha encontrado que los meditadores experimentados han alterado significativamente la estructura y función del cerebro, pero un número creciente de estudios también ha encontrado que el entrenamiento de meditación relativamente breve en novatos (por ejemplo, el conocido programa MBSR de ocho semanas) también puede cambiar el cerebro Funcionar, mejorar el bienestar y reducir los síntomas de depresión y ansiedad.
Y, dicen los autores, los resultados pueden ser aplicables en una serie de entornos, tanto para niños como para adultos. “Nuestros hallazgos sugieren una base biológica potencial para la forma en que se pueden fomentar la atención y los diferentes aspectos de la inteligencia social”.
Añaden que este tipo de sensibilidad es especialmente importante hoy en día, ya que nuestra comunidad se vuelve más global y la comprensión de las experiencias de los demás es más esencial.
“Con la creciente globalización, la interconexión y la complejidad de nuestras sociedades, las” habilidades sociales “se han vuelto cada vez más importantes”, dicen. “Las competencias sociales, como la empatía, la compasión y la perspectiva de otra persona, permiten una mejor comprensión de los sentimientos y las diferentes creencias de los demás y son cruciales para una cooperación exitosa”.
La meditación, en sus diferentes formas, puede ser una forma poderosa de aumentar los tipos de inteligencia que más importan.
Articulo escrito por Alice G. Walton y publicado por Forbes, que puede ver siguiendo el siguiente enlace y traducido pro Marcela Martire
https://www.forbes.com/sites/alicegwalton/2017/10/05/different-types-of-meditation-change-the-brain-in-different-ways-study-finds/amp/
Marcela Martire Soy Coach PCC Profesional Certified Coach de la International Coach Federation, Analista Conductual Disc , Certificate
EQ-i2.0 e EQ 360 Emotional Quotient Inventory. Apasionada de mi profesión y de todo los desafíos que implica trabajar en “ Gestión Estratégica de Personas “ , y cambios de Comportamiento “ Trabajo en organizaciones , especialmente PYMES , en cambios culturales, descubriendo patrones ocultos, y desarrollando líderes con pensamiento sistémico, inteligencia Inter-personal y Emocional Mi estilo Disc es DI y disfruto cuando conseguimos los resultados en equipo